Destacamos las bodegas y los vinos que ya tienen la nueva certificación internacional de viticultura regenerativa
Las bodegas y vinos certificados según el RVA, cuentan con un espacio destacado en nuestra página web. En la actualidad, siete bodegas y cinco vinos de cuatro países ya cuentan con esta certificación. Con este nuevo espacio, desde la Asociación de Viticultura Regenerativa queremos poner en valor las bodegas y vinos que han completado el proceso de certificación y animamos a las bodegas que aún no están certificadas, a seguir este ejemplo.
Las bodegas certificadas a fecha de hoy son Domaine Mirabeau (Côtes de Provence, Francia), Domaine Lafage (Roussillon, Francia), Lima & Smith (Vinho Verde, Portugal), Miguel Torres Chile (Región del Maule, Chile), Familia Torres (Penedès), Clos Mogador (Priorat) y Jean Leon (Penedès), así como otros pequeños viticultores catalanes. Los vinos certificados son La Réserve Rosé 2023 (Domaine Mirabeau), Clos Ancestral Blanco 2023 y Forcada 2023 (Familia Torres), Nereda Blanc Bio 2023 (Domaine Lafage) y Jean Leon Vinya Gigi Chardonnay 2023 (Jean Leon).
Las bodegas interesadas en certificar sus vinos y viñedos deben presentar su solicitud a través de la web de la Asociación de Viticultura Regenerativa: Certificación RVA • Asociación Viticultura Regenerativa.
¿Qué es la certificación Regenerative Viticulture Alliance? Te lo explicamos al detalle:
La certificación de viticultura regenerativa, conocida como Regenerative Viticulture Alliance (RVA), es una iniciativa de la Asociación de Viticultura Regenerativa, que tiene un alcance internacional y demuestra su compromiso a nivel mundial en la promoción de prácticas de cultivo sostenibles.
Dentro del ámbito de la viticultura regenerativa, la Asociación de Viticultura Regenerativa (AVR) establece dos niveles de certificación distintivos: TRANSITION y CERTIFIED. El objetivo de esta clasificación es doble: por un lado, reconocer y valorar los esfuerzos de los viticultores para adoptar prácticas de cultivo más sostenibles y respetuosas con el entorno; y por otro, proporcionar a los consumidores información transparente sobre los métodos de producción de los vinos que eligen.
El sello TRANSITION se otorga a aquellas fincas que han comenzado a implementar prácticas regenerativas, marcando un compromiso inicial y una etapa de transición hacia técnicas agrícolas que promueven la salud del suelo y la biodiversidad. Una de las prácticas más relevantes en este nivel es la cobertura vegetal: se requiere llegar a un mínimo de un 50% del total de la zona de producción durante el primer año, y en 6 años un mínimo de un 75% del total de la zona de producción.
En contraste, el sello CERTIFIED se reserva para las fincas que han incorporado completamente estas prácticas regenerativas, evidenciando mejoras significativas en la salud del suelo y en la conservación del entorno natural. Para este nivel, se pide una cobertura vegetal completa: como mínimo un 75% del total de la zona de producción. Esta diferencia en la cobertura vegetal es un ejemplo claro de la distinción entre los dos sellos, y el resto de prácticas y diferencias se pueden consultar en el estándar de certificación colgado en nuestra web.
Para conseguir el sello TRANSITION y CERTIFIED, es requisito indispensable que la finca disponga ya de un certificado ecológico o que, como mínimo, cumpla con las prácticas ecológicas establecidas. En el caso de que la finca no cuente con el sello ecológico, se realizará una auditoría doble que abarcará tanto los aspectos ecológicos como los regenerativos. Este proceso de auditoría se lleva a cabo en colaboración con Ecocert, una empresa auditora de prestigio reconocida por su pericia en sostenibilidad.
La decisión de establecer estos dos niveles de certificación refleja la comprensión de que el camino hacia la regeneración no es fácil y requiere un compromiso firme y progresivo. Además, esta estructura de certificación representa un avance respecto a la agricultura ecológica, exigiendo un nivel más alto de prácticas sostenibles y transparentes.